El Zen en la Vida de Steve Jobs: Más Allá de la Tecnología
El Zen es una rama del budismo que nació en la India, pasó a China y de allí a Japón, expandiéndose posteriormente por todo el mundo. En el budismo que conocemos en Japón, hay varias sectas, y la mayoría se basa en textos y palabras sagradas para aprender las enseñanzas. Sin embargo, el Zen valora la iluminación que Buda alcanzó a través de la meditación, buscando aprender y alcanzar este estado mediante la práctica de la meditación. La palabra "Zen" significa "mente tranquila y serena". Es una práctica de sentarse en silencio para estabilizar la mente y comprender la verdad.
Actualmente, el Zen es una palabra reconocida mundialmente. La meditación que practica el Zen ayuda a aliviar el estrés, reduce el dolor, y en el trabajo, ayuda a concentrarse y ser más activo. En Estados Unidos, muchas universidades ofrecen cursos sobre budismo, e incluso algunas ofrecen prácticas de meditación. Uno de los empresarios más influyentes por el Zen ha sido Steve Jobs. Su obsesión con la simplicidad se reflejó en los productos que creó, llevando consigo la esencia del Zen.
Steve Jobs y el Zen
Steve Jobs fue una de las personas más influenciadas por el budismo y el Zen. A los 17 años, viajó a la India y se encontró con la idea de vivir cada día como si fuera el último. Esta perspectiva oriental sobre la religión dejó una fuerte impresión en él y cambió su vida. Cada día se preguntaba: "¿Si hoy fuera el último día de mi vida, realmente querría hacer lo que voy a hacer hoy?". Durante su tiempo en la universidad, Jobs asistió a dojos y centros Zen en California. Fue allí donde recibió instrucción de un monje Zen japonés y conoció a Kobun Otogawa, un monje con el que estableció una profunda relación.
Kobun Otogawa (1938-2002)
Incluso cuando Jobs se casó con Laurene Powell, eligieron una ceremonia budista dirigida por Otogawa. Hubo un momento en el que Jobs consideró seriamente convertirse en monje y mudarse a un monasterio en Japón, pero Otogawa lo persuadió para que continuara con su pasión por la creación de productos, integrando las enseñanzas del Zen en su vida diaria. La influencia del Zen en la vida y trabajo de Jobs es evidente. Los productos de Apple, como el iPhone, son conocidos por su diseño simple y hermoso. Uno de los factores clave de este éxito es la filosofía del Zen que Jobs continuó persiguiendo: eliminar lo innecesario y enfrentarse a la esencia.
Hoy en día, los empresarios de todo el mundo están adoptando prácticas de mindfulness y meditación. Quieren tomar decisiones con claridad en estos tiempos inciertos y complicados. El Zen, que es la base de la atención plena, ya está siendo adoptado por políticos y empresarios en Japón.